Sangrar por la boca es un síntoma que puede generar gran preocupación, ya que puede estar relacionado con diversas condiciones, desde problemas menores hasta afecciones más graves. Este artículo abordará las causas más comunes de este fenómeno, cuándo debe considerarse una urgencia médica, y cómo se puede diagnosticar y tratar según el origen del sangrado.
Causas Comunes de Sangrado por la Boca

Existen múltiples causas que pueden provocar el sangrado bucal. En muchos casos, el sangrado proviene de lesiones o infecciones localizadas en la boca, pero también puede ser el resultado de problemas en otras partes del cuerpo.
Una de las causas más frecuentes es el traumatismo oral, como mordeduras accidentales en las mejillas, lengua o labios, cepillado dental agresivo, o el uso inadecuado del hilo dental. Estos traumas suelen causar un sangrado leve y se resuelven rápidamente sin necesidad de intervención médica.
Las enfermedades de las encías, como la gingivitis o la periodontitis, son otra causa común. Estas afecciones se desarrollan debido a la acumulación de placa bacteriana y provocan inflamación, sensibilidad y, a menudo, sangrado al cepillarse los dientes o al masticar alimentos duros.
Las úlceras bucales o aftas también pueden ocasionar sangrado. Estas lesiones dolorosas pueden surgir por estrés, deficiencias nutricionales o irritación local, y aunque son molestas, generalmente no representan un problema grave.
En algunos casos, el sangrado por la boca puede estar relacionado con problemas en las vías respiratorias superiores o el tracto digestivo, como la ruptura de vasos sanguíneos en el esófago o la garganta debido a tos severa, vómitos repetidos o esfuerzo físico intenso.
Los trastornos hemorrágicos y problemas de coagulación también pueden ser responsables. Enfermedades como la hemofilia o el uso de anticoagulantes pueden hacer que el sangrado sea más fácil de desencadenar, incluso con un trauma menor.
Cuándo el Sangrado por la Boca es Motivo de Preocupación
Aunque algunas causas de sangrado oral son inofensivas y se resuelven rápidamente, otras requieren atención médica inmediata. Una señal de alarma es la aparición de sangrado sin una causa obvia, como una lesión o trauma. Esto puede indicar problemas subyacentes, como un trastorno de coagulación o una enfermedad sistémica.
Si el sangrado es abundante, persistente, o está acompañado de otros síntomas como dolor severo, dificultad para respirar, vómitos con sangre (hematemesis), mareos, o debilidad, es crucial buscar atención médica de inmediato. Estos signos pueden indicar condiciones graves como úlceras gástricas, varices esofágicas, o incluso cáncer oral.
Otro escenario que debe considerarse una emergencia es cuando el sangrado proviene de las encías, pero se acompaña de inflamación severa, fiebre o pus, ya que esto puede indicar una infección dental o periodontal avanzada que podría extenderse a otras áreas del cuerpo.
Diagnóstico y Tratamiento del Sangrado por la Boca

El diagnóstico de las causas del sangrado por la boca puede requerir una combinación de examen físico, análisis de sangre y, en algunos casos, pruebas de imagen. El médico o dentista evaluará el área afectada en busca de lesiones visibles, inflamación o signos de infección. Si el origen no es claro, pueden solicitarse estudios adicionales como endoscopias o pruebas de coagulación para descartar problemas más profundos.
El tratamiento dependerá de la causa específica. En casos de lesiones menores, la recomendación puede incluir medidas caseras como enjuagues con agua salada, compresas frías, y evitar alimentos duros o irritantes hasta que la herida sane.
Para enfermedades de las encías, el tratamiento puede incluir limpiezas dentales profesionales, enjuagues antimicrobianos, y educación sobre técnicas adecuadas de cepillado e higiene oral.
Si el sangrado es consecuencia de una condición sistémica como un trastorno de coagulación o el uso de anticoagulantes, el médico puede ajustar la medicación o recetar terapias específicas para mejorar la coagulación.
En casos graves, como el sangrado causado por úlceras gástricas o varices esofágicas, el tratamiento puede requerir procedimientos especializados como la endoscopia para detener el sangrado y tratar la afección subyacente.
Prevención y Cuidados Generales
La prevención del sangrado por la boca se centra en mantener una buena salud oral y general. Esto incluye cepillarse los dientes dos veces al día con una técnica suave, usar hilo dental regularmente, y visitar al dentista para limpiezas y revisiones periódicas. Evitar fumar, consumir alcohol en exceso y mantener una dieta equilibrada rica en vitaminas y minerales también puede reducir el riesgo de problemas bucales.
Para personas que toman anticoagulantes o tienen trastornos de coagulación, es importante seguir las recomendaciones médicas y evitar actividades que puedan provocar lesiones.
El sangrado por la boca puede variar desde una molestia menor hasta un síntoma de una condición médica grave. Reconocer las señales de alarma y buscar atención médica oportuna puede ser clave para garantizar un tratamiento eficaz y prevenir complicaciones serias.